Con una inversión de 700 millones de dólares, la empresa sueca Volvo comenzará su historial de fabricación de autos pesados en México, y se unirá a la plataforma de producción y exportación que ya está instalada en el país.

La empresa informó que va a construir una planta en Nuevo León y se enfocará en la producción de unidades pesadas convencionales de Volvo y Mack.

Además, del ensamble de vehículos convencionales también se fabricarán y pintarán cabinas.

La compañía informó que este nuevo complejo de manufactura complementa la producción en Estados Unidos del grupo y proveerá capacidad adicional para apoyar los planes de crecimiento tanto de Volvo Trucks como de Mack Trucks en Estados Unidos y Canadá.

Así como la venta de camiones Mack en México y América Latina. Se estima que la planta inicie operaciones en 2026.

“Monterrey ofrece eficiencias logísticas significativas para apoyar las ventas de las regiones suroeste y oeste de Estados Unidos, México y Latinoamérica.

“Por su proximidad con la frontera estadounidense y su infraestructura bien desarrollada, el grupo considera que Monterrey es una localidad ideal para construir un ecosistema maduro de suministro y producción”, apuntó Volvo.

La empresa se suma a la plataforma integrada ya por 15 marcas asociadas, 14 armadoras y 1 de motores.

La empresa añadió que el crecimiento en Norteamérica es una prioridad estratégica del grupo y esta inversión forma parte de un esfuerzo integral para incrementar la fortaleza y flexibilidad de la huella industrial y la cadena de suministro en la región.

Además de la nueva planta, Volvo acordó adquirir una planta de producción de vehículos comerciales en Carolina del Norte que produce cabinas para los camiones pesados y medianos de Mack por aproximadamente 40 millones de dólares.

Este acuerdo fue anunciado el 1 de agosto y se espera que se cierre en la segunda mitad de 2024.


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